Entrevista a Pablo Ferrer, creador de “La santísima trinidad”

Hoy entrevistamos a Pablo Ferrer Torres, que acaba de publicar su obra, “La santísima trinidad”, que según el mismo describe, es un libro sobre “El sonido del pop electrónico de masas. 4 décadas de Depeche Mode, New Order y Pet Shop Boys es una historia organizada cronológicamente en la cual se van entrelazando las trayectorias individuales de tres de las bandas electrónicas más importantes que han existido y que han marcado el devenir del pop electrónico de las últimas cuatro décadas: Depeche Mode, New Order y Pet Shop Boys. Desde 1977 hasta la actualidad.”
The Sound> Hola pablo, enhorabuena por la publicación y vamos a ir al grano con la entrevista.
Pablo> Hola Víctor, encantado de estar aquí contigo y responder a tus preguntas.
The Sound ¿Recuerdas el primer álbum de música que escuchaste el cual influenciara en tus gustos musicales?, ¿y la primera canción?
Pablo> El primer álbum que escuché que marcó mi posterior gusto musical fue Behaviour de Pet Shop Boys, en octubre de 1990. A partir de ahí empecé a investigar un poco y enseguida descubrí Violator de Depeche Mode, que ya llevaba unos pocos meses en el mercado. En aquella época no era tan fácil ampliar conocimientos. Mi familia y el entorno me orientaban un poco pero dependía de sus gustos musicales. Ahora escucho una canción que me gusta en Spotify y puedo ver artistas similares e investigar. En los noventa debía buscar la información devorando programas, Sputnik de TV3, y revistas especializadas, Rock de lux, entre otras muchas. A veces era frustrante pero cuando daba en el clavo la alegría era mayor.
La primera canción que me enganchó fue “So hard” de Pet Shop Boys sonando en los 40 Principales. En cuanto sonaron las primeras notas pensé que algo nuevo y muy bueno me estaba sucediendo.
The Sound> ¿Grupo favorito?, si tuvieras que decidir solo uno, ¿cuál sería?, lo sabemos, es complicado.
Pablo>Es muy complicado, pero siguiendo con la respuesta anterior, si me tengo que quedar con un grupo escogería a Pet Shop Boys. Tenía poca cultura musical, prácticamente nula, pero cuando los escuché por primera vez sabía que eran únicos. Eso fue en 1990, y más de tres décadas después sigo pensando lo mismo.
The Sound> ¿Qué te embarcó a escribir a escribir este libro y sobre estos grupos?
Pablo> He leído gran cantidad de libros, entrevistas y textos de Depeche Mode, New Order y Pet Shop Boys, pero no existía ningún trabajo que se centrara exclusivamente en las conexiones de estos grupos y de las bandas del tecno pop en general. Por lo que decidí hacerlo yo. Trato todos los puntos en común de las tres bandas, que los tienen y muchos. Eso es lo relevante del libro, lo que puede interesar más al lector. No solo me centro en contar sus biografías por separado, sino que trato de entrelazar toda la información en común. Especialmente en los 80 se miraban de reojo. Digamos que los tres se motivaban viendo la maravilla que había creado el otro e intentaban superarla. Ejemplos hay muchos, y todos están en el libro.
The Sound> Nos suponemos la respuesta anterior* esto no se publicará. Pero esto si… ¿Y porque te marcaron tanto esas bandas para llegar a escribir sobre ellas?
Pablo> Porque son los que tienen una carrera más constante, por su popularidad, por su periodicidad a la hora de publicar nuevos trabajos… Y porque podía extraer una mayor cantidad de conexiones entre sí. Por supuesto, acepto otros puntos de vista. Es más, sabía perfectamente que se me podría criticar por escoger estos tres grupos y no otros. Me supo fatal dejar fuera a The Human League, Soft Cell, Kraftwerk, OMD, Yazoo, Fangoria o Erasure, pero todo está explicado en el libro.
The Sound> No cabe duda, que quizás, los precursores o padres fueron Kraftwerk, inspiradores de esas 3 bandas de las que tratas en tu libro, La santísima trinidad, e incluso de otras más dispares como, David Bowie o Rammstein. ¿Qué opinas de Kraftwerk como la antesala de todo todo el movimiento electro pop, synth pop, future pop y demás estilos relacionados?
Pablo> Como dices, Kraftwerk fueron uno de los precursores del sonido electrónico. Fueron pioneros en todo o casi todo, pero curiosamente no fueron los artistas que más influyeron a la Santísíma Trinidad. Este privilegiado lugar lo ocupa David Bowie. A un segundo nivel están Iggy Pop y los propios Kraftwerk, especialmente para Depeche Mode y New Order. Pet Shop Boys llegaron más tarde y sus influencias eran más variopintas. A Neil Tennant por ejemplo siempre le han fascinado las grandes voces femeninas. Pero el nexo de unión de todos era Bowie.
The Sound> Ahora, nos metemos en materia, con el pasado, presente y futuro de nuestra ciudad, Valencia. Como bien sabes, esta ciudad fue un referente a nivel mundial en los 80s y primeros 90s, algo, que nos ha marcado a mucha gente de nuestra quinta. Pero esas décadas doradas, pasaron y Valencia entre en la “oscuridad”, no musical 😛, y a día de hoy, parece que, por lo menos, en cuanto a conciertos, comenzamos a recuperar algo de esa esencia. ¿Qué piensas de la ciudad donde has vivido musicalmente?, ¿a dónde crees que vamos?
Pablo> Valencia siempre ha sido cuna de grandes artistas. También se ha trabajado relativamente bien desde el punto de vista empresarial, pero el valenciano nunca se ha vendido bien. Y no me refiero sólo a la excepcional escena de clubes de los ochenta y principios de los noventa. En aquel entonces éramos auténticos referentes europeos, pero se sacó poco provecho de toda aquella maravilla. Teníamos a los Kraftwerk del sur de Europa, Interfront. Este grupo si hubiese surgido en Lyon, Frankfurt o Manchester tendrían como mínimo una calle en su honor. También teníamos a los djs más innovadores. Eran auténticos selectores musicales, muy avanzados a su tiempo. Y no sólo me refiero a Fran Lenaers. Se podría haber protegido este movimiento cultural sin precedentes, sus discotecas, sus sellos discográficos, los profesionales que habían detrás, y ahora vivir de rentas. Convertir a Valencia en una gran marca de la diversión y de la cultura alternativa. Manchester, Detroit, Ibiza o Berlín sí que han protegido su legado cultural. Ahora ves las salas valencianas, auténticas catedrales del baile y la diversión, y da verdadera pena. Tampoco ha habido un apoyo claro de la administración, da igual el color político. Por ejemplo, tuvimos excelentes festivales de música avanzada como el Observatori y nadie se acuerda de él. Con una mayor apuesta por parte de la administración tendríamos nuestro propio Sónar. Por suerte nos queda el Volumens que espero que crezca y se consolide. También tuvimos salas como Le Club que fue un auténtico referente cultural a principios de este siglo. O la eterna Barraca que sigue adelante. Pero hay que mirar hacia el futuro. El problema es que tampoco nos ha beneficiado mucho la personalidad del valenciano. Nuestra manera de ser, vivir el presente, más bien quemarlo, y tener poca previsión de futuro. Nuestro “pensat y fet” tan característico. En algunos aspectos hemos sido nuestros peores enemigos. Como ves, no soy muy optimista, pero siempre hay luz al final del túnel. Por suerte, y como bien sabes, hay una parte rebelde en la mentalidad valenciana que hace que salgamos adelante aunque a veces todo sean trabas. Ahora se está trabajando bien todo aquel legado con libros y diversos trabajos muy interesantes. Hay que cuidar todo eso.
The Sound> Ya que hablamos del presente y del futuro, ¿qué nuevos grupos, aceptamos bandas a partir del 2000, te han sorprendido?
Pablo> Me gusta mucho la música electrónica en general, y si sólo he de nombrar artistas surgidos a partir del 2000 me quedaría con Rufus du Sol, Booka Shade, Tale of Us, Maceo Plex, Edu Imbernon o Dubfire. Otra banda que suelo escuchar habitualmente es Rammstein, pero surgieron un poco antes.
The Sound> Ahora resides en Praga, ¿cómo está el ambiente musical por la República Checa?, nosotros, deseando ir a festivales como el Prague Gothic Treffen.
Pablo> La música checa no me ha marcado absolutamente nada así que poco puedo decir al respecto. Lo que más me gusta de aquí es su gran cultura de club, particularmente de clubes techno y hardtecnho. También de drum ´n´ bass. La escena goth es bastante interesante también. Sin embargo, el ambiente ochentero es demasiado comercial. Casi da vergüenza ajena. Madonna, Bananarama y poco más. Bueno, sí, Depeche Mode que aquí son Dioses y deja de contar. Destacaría a Brno porque considero que es una ciudad muy avanzada en cuanto a sonidos underground. En su momento también lo fue Ostrava. Debe ser una reacción ante el poder económico y social de la capital, que se inclina más hacia lo comercial. Hace tiempo seguro que todo era mejor, pero la influencia de la música latina y comercial es muy fuerte y se ha llevado por delante casi todo. Otra cosa que me llama la atención de aquí es que en cualquier sitio te montan una rave. En pleno centro de la ciudad. Las leyes son mucho más permisivas al respecto.
The Sound> Y para ir finalizando, ¿proyectos futuros?
Pablo> Tengo varios en mente, tres en concreto, pero por ahora no me he inclinado por ninguno.
The Sound> Pues Pablo, ha sido un placer y te deseamos nuestros mejores deseos con, La santísima trinidad, esperamos pronto ver otros libros tuyos editados.
Pablo>Lo mismo te digo, Víctor. Gracias por la invitación y gracias a todos los lectores de tu página. Un abrazo.
La Santísima Trinidad se puede conseguir a través de este link: https://linktr.ee/pabloferrer
Mil gracias a Pablo Ferrer por concedernos esta entrevista sobre La Santísima Trinidad, os recomendamos visitar su web desde el siguiente enlace www.pabloferrertorres.com